Comercialización Profesional de Energía

Tag: energias

Información de Mercado

El futuro energético en una Argentina normal

La industria energética es capital intensiva, genera puestos de trabajo de alta calificación, presenta un bajo grado de informalidad, y paga impuestos y tasas nacionales, provinciales y municipales (además de regalías en segmentos aguas arriba de su cadena de valor y retenciones a la exportación). La Argentina opera tecnología de punta después de Estados Unidos en la producción de recursos no convencionales (fracking) y tiene una de las industrias de gas natural más maduras del mundo, con sectores aguas abajo de la cadena de valor, como el gas natural vehicular y los gasoductos virtuales (módulos de GNL transportados en camión), que producen equipos para el mercado doméstico y la exportación. Sus ingenieros han desarrollado la producción de turbinas hidroeléctricas de especialidad y calidad internacional, y una provisión de insumos y servicios que abastecen la industria local y ofrecen oportunidades de negocios en el mercado regional e internacional. Tiene uno de los mayores complejos internacionales en la producción de biodiésel y cuenta con plantas productoras de bioetanol de maíz que complementan su ciclo tecnológico en interacción con la cadena agroindustrial.

La mayor inserción de las energías renovables (solar y eólica) en combinación con el circuito científico tecnológico abre oportunidades de complementación y desarrollo en la producción de hidrógeno, amoníaco y equipos asociados (hidrolizadores, baterías, celdas combustibles, componentes de molinos eólicos). Y, no menos importante, la Argentina integra el club de potencias nucleares. Fabrica reactores modulares de investigación que compiten con los de los países desarrollados y tiene avanzada la terminación de un reactor modular prototipo (Carem) que puede ser modelo de un proyecto comercial de exportación para productos de alta tecnología (small modular reactors).

Pero la Argentina también está entrampada en políticas de corto plazo que dificultan los consensos necesarios en torno a planes y programas de largo plazo. Esos planes y programas de largo plazo condicionan inversiones en muchos sectores productivos y, de manera especial, el energético. El predominio del corto plazo en la industria energética ha combinado discrecionalidad regulatoria con precios y tarifas que no reflejan costos económicos y que tienen como contracara la ineficiente asignación de recursos, el subdesarrollo del potencial y la acumulación de subsidios con fuerte impacto en el déficit de las cuentas públicas y externas. Sumemos a lo micro un contexto macroeconómico con un riesgo país de 2000 puntos, inflación anual del 100%, una brecha cambiaria del 100% y cepos por doquier para la disponibilidad de divisas, y, digámoslo claramente, en estas condiciones el desarrollo productivo será muy limitado, y el potencial seguirá durmiendo el sueño de los tiempos.

Casi todo el espectro de fuerzas políticas converge en destacar las oportunidades que el mundo ofrece al sector energético argentino. Sin embargo, todavía no hay suficiente conciencia, ni en la clase política ni en la sociedad en general (engañada con sofismas como los de “energía gratuita” y subsidios que “los paga Dios”) de las ingentes inversiones que el desarrollo de todo ese potencial involucra. El año pasado la Argentina tuvo una balanza comercial energética deficitaria de 4500 millones de dólares y las cuentas públicas soportaron subsidios energéticos de más de 15.000 millones de dólares, financiados con emisión.

En Ensayo sobre la ceguera, José Saramago escribe: “Sin futuro el presente no sirve para nada, es como si no existiera”. Imaginemos, entonces, por un momento, un país que se reconcilia con el futuro, un país normal, con las tasas de riesgo, los niveles de inflación y las políticas cambiarias que exhiben algunos de nuestros vecinos de la región. En una estrategia energética de largo plazo que incluye proyecciones a 2040, e involucra cuatro mandatos y medio de gobierno, hay dos escenarios alternativos conjeturales posibles para definir el rumbo del desarrollo sectorial teniendo en cuenta las tendencias predominantes en las transiciones energéticas que se dan en el mundo, conflicto europeo incluido. Por un lado, un escenario de desarrollo gradual y complementario de nuestra riqueza energética potencial relativa (hidrocarburos, energías renovables y alternativas, biomasa, hidrógeno), teniendo como objetivo el mínimo costo vis à vis un escenario de descarbonización acelerada, también de mínimo costo, comprometido con el objetivo de alcanzar emisiones neutras de CO2 en 2050. El segundo escenario desde el presente aparece como disruptivo por las transformaciones que se deben dar y la secuencia hacia la normalidad. Reconversión acelerada del parque automotor (vehículos eléctricos), electrificación edilicia y acelerada irrupción de las energías renovables (además de inversiones intensivas en transporte eléctrico). El escenario gradual de mínimo costo, en tránsito al país normal, prioriza el desarrollo intensivo del potencial de petróleo y gas no convencional en la presente década con autoabastecimiento y crecientes saldos exportables a la región. En la década siguiente la energía eólica proveniente del sur de la provincia de Buenos Aires podría empezar a competir y a desplazar el gas natural en la generación eléctrica. El excedente de gas natural comienza a exportarse a la región en la década presente por ductos, y, en volúmenes crecientes como GNL al mercado internacional a partir de la siguiente (la exportación de GNL al final del período podría alcanzar los 70 millones de m3/día promedio). Con los vientos de la Patagonia se podría comenzar a producir hidrógeno verde en los próximos años y alcanzar la instalación de unos 70.000 MW de potencia eólica en la siguiente década, que se pueden transformar en 28 millones t/año de amoníaco exportables al mercado internacional (vientos para exportar).

 

El tránsito a la normalidad asume una estabilidad macroeconómica en el contexto de una estrategia de valor agregado exportable, articulada con nuestros socios regionales, y un plan energético de largo plazo, con inversiones privadas predominantes. Muchas inversiones logísticas también van a ser realizadas por privados, pero en algunas regiones se requerirá el complemento de infraestructura pública (rutas, ferrocarriles, conectividad).

Solo con el aporte de las exportaciones petroleras, la sustitución de importaciones de gas natural y el crecimiento de las exportaciones de gas en la región, la Argentina puede alcanzar una balanza comercial energética superavitaria, dependiendo de los precios, de alrededor de 10/12 mil millones de dólares, hacia 2028. Teniendo en cuenta el déficit del presente estamos hablando de alrededor de unos 16.000 millones de aporte adicional de divisas.

El desarrollo del potencial energético no solo permitirá revertir el balance externo del sector, también va a facilitar acceder al sector productivo y a la población a un suministro energético muy competitivo con el de los países de la región y del mundo, aun desmontando el sistema de subsidios y permitiendo que los precios y las tarifas del sector recuperen costos económicos con una tarifa social focalizada y controlada. En un país normal podemos contar con un gas natural valorizado en alrededor de tres dólares promedio el mmbtu en boca de pozo, y un precio de la energía eléctrica mayorista promedio convergiendo a los 57 dólares el megavatio en la próxima década. Una gran ventaja comparada relativa en una estrategia de desarrollo de valor agregado exportable.

 

 

 

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/opinion/el-futuro-energetico-en-una-argentina-normal-nid22032023/

 

 

 

Información de Mercado

la camara de energias renovables advierte del dano del impuesto al viento sobre las inversiones

La Cámara de Energías Renovables advierte del daño del “impuesto al viento” sobre las inversiones

Una ordenanza del concejo deliberante de Chubut quiere obligar a las centrales a pagar un impuesto que no fue previsto en las inversiones.

La energías renovables se convirtieron en también aliados de la producción agropecuaria en muchas zonas.

La Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER) alerta que la tasa municipal, llamada también “”, que pretende imponer Puerto Madryn () genera graves perjuicios económicos sobre los proyectos que fueron construidos en la zona.

En este sentido, la Cámara hace referencia a la ordenanza N° 11.546, emitida por el Concejo Deliberante de Puerto Madryn, que obliga a las centrales de energías limpias en operación comercial a pagar millonarias sumas de dinero que no fueron previstas en sus propuestas de inversión, ocasionando serios riesgos financieros en un contexto económico ya de por sí adverso para el sector.

Para tomar dimensión de su impacto, CADER estima que un parque eólico de potencia promedio (100 MW) se vería obligado a pagar 20 millones de dólares.

Juan Manuel Alfonsín, director ejecutivo de CADER, aseguró que “hay compañías que están evaluando la judicialización de la tasa en Puerto Madryn para evitar la penalización de las centrales, la pérdida de empleos y que se frene el desarrollo futuro de proyectos”.

De prosperar esta situación, la provincia de Chubut avanzaría en una directa violación de la seguridad jurídica contra el sector de las energías renovables, considerando que la Legislatura Provincial adhirió a la Ley 27.191

La Ley 27.191, normativa que prevé la posibilidad de trasladar al precio de venta de  cualquier impuesto, tasa o gravamen- sea nacional, provincial o municipal – que se incorpore a posteriori de la firma del contrato PPA, lo que terminaría impactando sobre toda la demanda de energía eléctrica nacional.

“En caso de trasladarse el nuevo impuesto a tarifa los usuarios de todo el país estarían pagando una tasa local de Puerto Madryn”, alertó.

Desde el punto de vista jurídico, Alfonsín agrega que el “impuesto al viento” carece de sustento legal, dado que no guarda relación con una prestación brindada por el municipio de Puerto Madryn.

Ante esta situación, CADER reclama la colaboración del Gobierno Nacional: “Solicitamos a las autoridades nacionales que tomen cartas en el asunto para evitar que las tarifas se vean incrementadas por un impuesto ilegítimo que penaliza la generación limpia, competitiva y eficiente”.

 

FUENTE: https://www.infocampo.com.ar/la-camara-de-energias-renovables-advierte-del-dano-del-impuesto-al-viento-sobre-las-inversiones/

Información de Mercado

El potencial de la Argentina en energías limpias es único

La energética lleva invertidos u$s250 millones para la instalación de dos parques eólicos en el país que generarán 100 MW cada uno. Además tiene el objetivo de alcanzar 500 MW en 2023.

AES Argentina es una de las principales empresas generadoras de energía eléctrica del país. Actualmente opera 10 plantas ubicadas en las provincias de Buenos Aires, Neuquén, Salta y San Juan, con una capacidad instalada de 3,800 MW, que representa el 12% de la potencia instalada en el país. Desde 2016 hizo una reconfiguración de su negocio para convertirse en la líder nacional en la generación de energías limpias y para esto desembolsó u$s250 millones en la construcción de dos parques eólicos de 100 MW cada uno, Vientos Bonaerenses I en la provincia de Buenos Aires, y Vientos Neuquinos en la provincia de Neuquén, que serán inaugurados en los próximos meses. En una entrevista con Ámbito Financiero, su presidente Martín Genesio ofreció su visión del sector que todavía tiene mucho por crecer y explicó los planes para los próximos años.

Periodista: ¿Cómo analizan la actualidad del sector de las energías limpias y particularmente lo que está haciendo la empresa en la materia?

Martín Genesio (MG): En lo que hace estrictamente a la empresa venimos trabajando muy fuerte y hemos aprovechado bastante bien las posibilidades que ha ofrecido este Gobierno en el mercado de la generación de energías limpias, más precisamente con el Plan Renovar. En ese sentido seguimos apostando a seguir creciendo en el sector y por ese tenemos un pipeline, o para decirlo más claramente, tenemos en el “banco de suplentes” proyectos para generar 1.000 MW adicionales, básicamente quintuplicar lo que hoy tenemos en marcha. Tratamos de focalizarnos más en los mercados donde podemos firmar contratos con clientes privados, pero también estamos a la espera de futuras rondas del Gobierno. Incluso se anunció públicamente que posiblemente antes de fin de año esto suceda por lo que aquí también hay mucha expectativa. Así es que tomando todos estos factores creemos que las perspectivas son muy alentadoras.

P: AES es una multinacional en el desarrollo de energías que hoy está apostando con inversiones en la Argentina ¿Qué fortalezas y debilidades encuentran en el mercado local?

M.G.: Vemos que Argentina es un mercado muy grande con un potencial gigantesco; esto sin lugar a dudas es una fortaleza. Desde mi punto de vista es uno de los países con mayor potencial del mundo. Esto es porque Argentina tiene uno de los mejores recursos de vientos del mundo; no sé si el mejor pero por ahí debe andar. A la par, también tiene uno de los mejores recursos de sol, por lo que para la generación de energía solar también es excelente. Así es que tenemos vientos en el sur y sol en el norte, y a la par hay un gran potencial en materia de litio que se usa para construcción de sistemas de almacenamiento. Entonces AES entiende que la Argentina es un lugar muy positivo para estar y que este es un negocio a largo plazo en el que hay que apostar para poder crecer. También la Argentina tiene un recurso y un potencial gigantesco en materia de gas no convencional con Vaca Muerta y en ese sentido nosotros entendemos que esa potencialidad te da la posibilidad de acelerar un futuro energético más sustentable, basado tanto en viento, como en sol, en almacenamiento y en energía convencional que puede también ser desarrollada a partir del gas. Por ende, acá está todo. Hay países que le faltan todas estas cosas, otros que le faltan algunas y la Argentina tiene todo junto, es prácticamente único y nuestra visión sobre el país es esa, que es un país con un potencial enorme. Por eso, más allá de los avatares políticos, las cuestiones macro que todas las empresas están mirando, o que quizás puede haber o alguna cuestión coyuntural, nosotros lo vemos como un negocio de largo plazo y un país con una potencialidad enorme entendemos que es un lugar para estar y que tiene muchas ventajas competitivas con otros países. Por supuesto, que entre las contras se puede mencionar que Argentina es cíclico en materia de política y en materia económica. A la par, este es un año de elecciones muy particular y estamos esperando que las elecciones se lleven a cabo para que el futuro político se aclare y en ese sentido crecer sobre una base un poco más sólida.

P: Tal como sucede con otros sectores, el de ustedes en particular tiene muchos costos dolarizados y más con inversiones en marcha ¿como se mueven con la volatilidad de la moneda y cuánto impacta?

M.G.: En principio, más allá de los vaivenes políticos y económicos no hemos revisado inversiones de ningún tipo. Por supuesto que la volatilidad de la moneda genera ruido pero más que nada porque se complica el financiamiento. Por otro lado, en general, si bien el sector tiene costos en dólares, el negocio también cuenta con precios dolarizados. No hay una afectación directa al negocio pero sí hay una afectación en materia de conseguir financiamiento adecuado. Más allá de esto, hace 26 años que estamos en la Argentina y hemos pasado muchas otras tormentas financieras pero, como dije, este es un negocio a largo plazo. Entonces lo que estoy viendo es un reacomodamiento de las variables y una normalización de las cuentas públicas y creemos que en el mediano plazo vamos a estar en un sistema más estable que te permita hacer negocios más rápido y más grandes.

P: Con estas complicaciones para financiarse localmente que menciona ¿Dónde captan dinero para concretar esta expansión?

M.G.: Nuestra empresa se financia tanto con bancos locales como internacionales, buscando las mejores alternativas. Por supuesto también reinvertimos utilidades y en 2017 emitimos un bono corporativo que fue destinado también a inversiones.

P: En estos proyectos que hoy tienen para generar 1.000 MW adicionales ¿Qué nos puede adelantar y para cuando podrían concretarse?

M.G.: La mayoría de los proyectos que tenemos en carpeta son inversiones en energía eólica y algunos solares, Nuestro foco localmente va a seguir en las energías limpias y en este camino en el que apostamos a crecer. Respecto a los tiempos, todos están bajo análisis y esperamos que sea cuanto antes.

Fuente: https://www.ambito.com/el-potencial-la-argentina-energias-limpias-es-unico-n5031188

0036631755

Información de Mercado

Renovar 2.0 Un éxito sin precedentes!

RESULTADO OFERTAS ECONÓMICAS – 23 de Noviembre de 2017

A continuación les mostramos las ofertas recibidas en la ronda Renovar 2.0 con adjudicación prevista para la semana próxima. Los precios han tenido una notable reducción con respecto a las licitaciones previas ubicando en precios muy cercanos a las referencias internacionales.

Les mostramos los principales resultados.

 

renovar20precios

En cuanto a la cantidad de proyectos y MW ofertas la sobreoferta fue notable y prácticamente 9 veces la capacidad instalada a adjudicar.

presentacionesenergia

Considerando las ofertas recibidas creemos que los precios medios para Energía Eólica se ubicaran en 42/44 USD/MWh y 42/46 para Energía Solar, siendo estos los pisos del mercado en el corto plazo y el punto de partida para la negociación entre privados.

Es importante destacar que los precios enunciados se denominan faciales y el costo final para CAMMESA considerando los factures de incentivo y ajuste, considerando los 20 años de duración del contrato se deben incrementar en un 20%. Por ende como referencia para el segmento industrial, cumpliendo las mismas condiciones crediticias y los mismo plazo se ubican 56 a 65 USD/MWh.

Creemos que el 2019 será el auge de contratación entre Privados!

Conoce nuestros contratos por AHORRO y comenzá reduciendo tus costos de energía.

ahorrorenovable