Según informan desde la entidad bancaria, hasta agosto de este año se ha destinado la misma cantidad que a lo largo de todo 2019. En este sentido, la energía fotovoltaica ha sido el principal destino de estas inversiones con 1.500 millones, mientras que en la eólica ha sido de 600 millones.
De manera adicional, otros 300 millones han sido para financiar otras tecnologías de generación renovable y se han suscrito préstamos por valor de 300 millones relacionados con el transporte y la licuefacción de gas natural, «tecnología imprescindible para posibilitar la implantación a gran escala de la generación renovable».
En los ocho primeros meses del año, la firma bancaria ha formalizado préstamos en España por valor de 1.600 millones, todos relacionados con fuentes de generación renovables, un 26% con respecto a todo el ejercicio anterior, cuando fue de 1.270 millones.
En el ámbito internacional, la cantidad asciende a 800 millones, especialmente, en proyectos de generación de energías renovables, «destacando el continuado compromiso con la energía eólica, tanto onshore como offshore.
En este sentido destacan dos operaciones realizadas en Chile, con un total de más de 800 MW, además de las llevadas a cabo en Canadá, que suman más de 500 MW. De manera paralela, la entidad ha participado en dos operaciones emblemáticas de eólica marina en Francia y Reino Unido, con una potencia instalada de más de 1.500 MW. En total, ha financiado 16 proyectos en este segmento.
Desde 2011, la potencia instalada de los proyectos de energías renovables financiados por CaixaBank es de 32.000 MW. La exposición de la cartera de energía de CaixaBank supone un 51% del total. De estos, un 62% se corresponden al ámbito de energías renovables.
De manera adicional, la cartera de energía renovable está integrada en un 58% por proyectos eólicos, un 31% fotovoltaicos, un 10% termosolares y el 1% restante por otras tecnologías.