Durante el día 1 del Wind & Solar Virtual Summit, evento producido por Latam Future Energy, Felipe de Gamboa, Director General de EDPR Colombia, fue uno de los disertantes del panel denominado “El rol de la energía eólica en el portafolio de los grandes actores regionales”.

Allí el directivo destacó que la empresa que representa planea construir 4 GW por año hasta el 2025, para alcanzar 20 GW en total. Y destacó que Colombia se destaca en la estrategia.

Precisó que EDPR cuenta con 800 MW eólicos en La Guajira que están “en proceso de maduración”, y que tienen otros dos emprendimientos más en esa zona: Alpha, de 212 MW, y Beta, de 280 MW, ambos adjudicados en la subasta a largo plazo de energías renovables del 2019.

Estos casi 500 MW deberían entrar en funcionamiento a finales del 2022. Pero “hay tres temas que son retadores en el momento de hacer estos proyectos”, indicó de Gamboa.

“Uno es el de las comunidades, que hay que manejar muy inteligentemente. En este momento estamos en la etapa crítica de obtención de licencia ambiental para la línea de conexión”, señaló.

Si bien ya comenzaron con las actividades en el área, Gomboa advirtió que algunos miembros de las comunidades que no están involucrados directamente en los procesos de negociación están reclamando derechos a ser consultados. “Eso lo hace aún más difícil”, agregó. Aseguró que el Gobierno está ayudando para su avance.

El segundo tema que mencionó el directivo tiene que ver con la actividad minera de carbón Cerrejón, que opera desde hace 35 años en La Guajira y no sólo cuenta con el puerto para sus transacciones comerciales sino con toda una infraestructura que debe convivir con el desarrollo de los parques eólicos.

“Todos convivimos con la infraestructura del Cerrejón. Se nos cruzan nuestras líneas eléctricas, férreas y rutas con las de ellos”, indicó de Gamboa.

Y señala que “lo que ellos nos piden, con toda la razón del mundo, es que su operación minera no se vea afectada con estas construcciones pero para ello se requiere de mucha coordinación y no es tan fácil”.

Por último, el ejecutivo de EDPR puntualizó sobre el intercambio de información y protocolo con las agencias de Gobierno, como con la Agencia Nacional de Licencias Ambientales, Instituto de Ecología, la Agencia Nacional de Consultas Previas.

“Para esa interacción el Gobierno tiene la mejor disposición de hacerla rápido pero también son protocolarios, llevan tiempo, toman trabajo y a veces devuelven documentos por pequeños detalles a subsanar”, lo cual demora mucho tiempo, observó.

Y concluyó: “En esos tres temas está ahora el 80 por ciento de nuestra actividad para llevar a estos proyectos a ponerlos a funcionar y producir energía eléctrica”.

No obstante a ello, de Gamboa recordó que a mediados de marzo obtuvieron la clasificación de “Proyecto de Interés Nacional Estratégicos” (PINES). “Eso hace que el Gobierno le dé prioridad a estos proyectos y mucho más seguimiento”, celebró.

“Eso ayuda inmensamente para que el Gobierno nos dé prioridad y de alguna manera le dé visibilidad en esas agencias estatales para que los proyectos se muevan más rápidos en estos temas protocolarios que hay que seguir”, resaltó el directivo.